Pez Buey - Leyendas y protección
El pez buey, o manatí, su nombre indígena, es un animal curioso del orden de los mamíferos acuáticos.
Su nombre fue dado por los antiguos navegadores que asociaban su canto al de las mitológicas sirenas. Es un animal mamífero acuático, posee un cuerpo grande y redondeado, lo que da el sobre nombre de vaca-marina en algunas regiones del país.
Existen 3 tipos de clasificaciones del pez buey: pez buey amazónico, pez buey marino y pez buey africano. La especie que encontramos en la costa brasileña es el pez buey marino, que en la vida adulta puede llegar a medir hasta 4 metros y pesar aproximadamente 800 kg.
El pez buey marino habita en las Américas en general, desde México hasta EEUU, pasando por América Central, Venezuela, Colombia, Guayanas, Surinam y Brasil.
La extinción amenaza esta especie que actualmente está protegida por leyes ambientales severas. En Brasil el manatí es protegido desde 1967.
El manatí es un animal solitario, sólo es visto en grupos en las épocas de apareamiento. Por ser solitario y de temperamento dócil, se convierte en presa fácil para los predadores. Sus hábitos alimenticios llaman la atención ya que el manatí llega a pasar 8 horas del día comiendo. Su alimentación consiste en algas, pasto acuático y diversas plantas marinas. Un animal adulto llega a consumir 10% de su peso en plantas y almacena hasta 50 litros de grasa como fuente energética para la temporada de sequía.
El pez buey contribuye en la biodiversidad marina ya que al alimentarse de ellas, evita que las algas se acumulen en un mismo lugar, o suban en masa a la superficie dificultando la vida de otras especies, además de sus heces servir como fertilizante.
De temperamento dócil, cuerpo robusto, macizo y rugoso, el pez buey posee cola larga y achatada. A pesar de no tener cuello, puede mover la cabeza en todas las direcciones. No es un animal veloz y pasa la mitad del dia reposando y durmiendo debajo del agua.
Su reproducción es baja, normalmente la hembra sólo genera 1 cachorro por vez y la gestación dura 13 meses. Cada hembra tiene, en medida, 1 cría cada 4 años. Entre madres y crías la comunicación se lleva a cabo a través de un gemido característico, que hasta dió origen a leyendas en la región de Lagoa de Guaraíras.
Los predadores naturales del pez buey son cocodrilos, tiburones, orcas y claro, los humanos.
Su caza indiscriminada por la creencia popular que posee 7 carnes diferentes para la obtención de aceites, cuero y hasta carne, hizo que la especie fuera casi exterminada. Hoy, la pesca del manatí sea de cualquier especie está prohibida.
En nuestra región es famosa la leyenda de que en el tiempo de la colonización un indio con hábitos caníbales, en un momento de locura devoró un niño en las proximidades de Lagoa de Guaraíras. La familia del niño dió aviso a las autoridades y el indio fue castigado. Como castigo, el indio quedaría dentro del agua hasta que fuese llamado y así quedó por mucho tiempo. Cuando los otros indios de la aldea fueron a llamarlo no lo encontraron.Lo que se encontró en la laguna fue un pez nunca visto, un pez buey. La noche siguiente se oía un gemido que hacía temblar toda el agua. En las noches de luna se veía el reflejo del pez buey vagando por las aguas, un gran misterio.
Leyendas aparte, es posible ver las apariciones del pez buey marino en las proximidades del Río Catu y en Sagi, donde hay un área de preservación de la especie.